- Cristina Villanueva-Meyer, M Arch
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La mayoría de las edificaciones se diseñan para cumplir con un propósito y tener un uso específico y, como dice el renombrado arquitecto Louis Sullivan, “La forma sigue a la función”. Sin embargo, la sociedad y la cultura evolucionan y, así, algunas edificaciones que tenían un uso en particular pasaron a cumplir otra función.
Los hospitales son un claro ejemplo de edificaciones que han evolucionado por los avances que ha habido. Si bien hay hospitales que siguen funcionando en sus antiguos edificios, muchos fueron bien remodelados, otros han sido demolidos y reconstruidos para poder cumplir con nuevas normas y avances tecnológicos, y otros pasaron a ser utilizados con otros fines.
Un claro ejemplo de esto fue el Hospital General de Madrid que desde 1805 había sido el centro médico más importante de España. Se cerró en 1969 y luego de muchas idas y venidas pasó a ser el hoy tan visitado Museo Reina Sofía. Otro ejemplo es el Hospital de La Misericordia, que después fue el Hospital San Juan de Dios en Quito, Ecuador. Fue levantado a mediados del siglo XVI y hoy es el Museo de la Ciudad. El Hospital de Betlemitas en ciudad de México, construido en el siglo XVII, es hoy el Museo Interactivo de Economía. En ciudades más pequeñas como Toledo, en España, el Hospital de Santa Cruz es hoy el Museo de Santa Cruz y, en Albarracín, el antiguo hospital del siglo XVIII es el museo local.
En Puerto Rico, el principal ejemplo del cambio de uso y función de hospital a museo lo podemos ver en el Museo de Arte de Puerto Rico. Este fue el edificio de cirugía del Hospital Municipal de San Juan. Luego de una remodelación en la que participaron los arquitectos Otto Reyes y Luis Gutiérrez, el edificio se convirtió en el centro artístico y cultural actual.
- Museo de Arte de Puerto Rico
Asimismo, en el Viejo San Juan, el antiguo Cuartel de Ballajá es hoy un centro cultural que alberga algunas exposiciones y el Museo de las Américas. En este local funcionó durante la II Guerra Mundial el Hospital General del Fuerte Brooke, al que en 1944 se cambió de nombre a Hospital General Rodríguez.
Así, podemos ver que, con el tiempo, grandes edificaciones han cambiado de uso y funcionalidad; en este caso de hospitales a museos, para pasar de albergar funciones del arte de la medicina a ser funcionales para las artes plásticas.
Referencias
- Cabañas Bravo, Miguel (1989). “Del Hospital General al Centro de Arte Reina Sofía” ISBN 84-381-0139-9.
- Maldonado, N. El Dr. Fernando Rodríguez Vargas; Galenus, PR, Vol. 21, Dic 2010.
- Vázquez Q. E. El hospital de la Capital, Galenus, PR, Vol 43, Dic 2013.