En Puerto Rico, de cara al siglo XXI, y como ocurre en otras jurisdicciones de Estados Unidos y en otros países del mundo, enfrentamos una preocupante epidemia de obesidad en nuestra población pediátrica. Estudios realizados por el Departamento de Salud en el 2005, y en los que se consideró un grupo representativo de estudiantes de segundo grado de escuelas públicas y privadas, revelaron que el 42% de estos niños tenían un peso mayor al recomendando para su edad y sexo. A raíz de estos hallazgos, (...)